martes, noviembre 02, 2010

Primero de Noviembre de dos mil diez.
Miles de seres humanos acuden a pasear, con treinta y tres grados Celcius, a los panteones que mas les acomoden.

Flores.

Algunas baratas, otras caras.

(Las mejores son las que uno se roba de las sepulturas del dia anterior)

Se acude en masa.
¿En qué momento los muertos salen a oler las flores?
¿En qué momento?

La costumbre era buena antes.

Había que poner aroma de flores para tapar el olor a muerte.
Coronas por doquier, arreglos florales de todos los que conocían al central.

Ya no se necesitan flores. (a no ser que esté fresco el fiambre)

Ahora se hace por inercia, por tradición, por estulticismo.

Y, las floristas ganan plata.

Los muertos no necesitan flores.
Hay una costumbre Gitana, que consiste en tomar una botella, ya sea de vino, o de champaña, sobre la tumba del deudo.
Los Gitanos saben que el muerto no va a salir a beber y por eso, se toman todas las botellas.
Moraleja: CÓmanse las flores.

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