No se puede negar que todo es cerrar y abrir.
Entrar o no entrar.
Matar o morir.
He perdido tu perfume hasta próximo aviso.
En el mercado de esclavos estoy con compromiso.
El plato repetido inseparable de la que fue nuestra parada escurridiza.
Nunca pienso la frase que llega a tocar en aquella calle y la cornisa.
Y reconozco que casi todo se pone con bandejas litúrgicas por llenar.
____
Incluida la noche, todo cabe en un saco de caramelos cocido por nosotros.
Todo es el nombre.
El nombre es nada.
Las pecas extrañas acepto.
Fragmento tras fra g m e n t o.
Celos.
MIentras suena el disco:
"No dejes que muera hoy el sol..."
sábado, marzo 01, 2008
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